Con arreglo a las leyes rusas, cuando una pareja casada con hijos menores presenta una demanda de divorcio, sólo el tribunal tiene derecho a decidir con quién se quedarán los hijos y a establecer las responsabilidades parentales del otro progenitor, como la pensión alimenticia y los derechos de visita.
El tribunal tomará en consideración el interés superior del niño. Ninguna relación genética con el niño (en caso de que se haya implementado un programa de donación de óvulos o de esperma) será garantía de que se le conceda la custodia a un padre genético.
Fuera de la sala del tribunal, los padres pueden elaborar un acuerdo sobre los derechos y responsabilidades del padre con o sin custodia. Dicho acuerdo debe ser aprobado por el tribunal y sólo puede ser enmendado mediante otra decisión judicial.